Cuando se usa el móvil 📱 demasiado tiempo, se crea una dependencia a nivel neurológico que nos genera una adicción.
WhatsApp y otras redes sociales están diseñadas para ser adictivas, pero no siempre lo sabemos. El punto es que estamos tan acostumbrados a este tipo de mensajería instantánea, que el comportamiento compulsivo puede que nos parezca normal 🤷♂️.
Una aplicación con más de 2.000 millones de usuarios, se ha logrado convertir en nuestra conexión con el mundo exterior, transformando nuestra conducta, haciéndonos capaces de responder mensajes hasta cuándo vamos caminando, o conduciendo; algo que puede ser prohibido y peligroso.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS QUE COMPRUEBAN TU ADICCIÓN A WHATSAPP?
Es normal negar la adicción, pues a todos nos cuesta en algún momento reconocer la dependencia incontrolable que podemos tener hacia las redes sociales, en este caso WhatsApp.
Sin embargo, es momento de conocer si esta dependencia nos está generando ansiedad 😓 y otros procesos pocos saludables, que pueden ser perjudiciales. Aquí te apunto los síntomas más comunes:
1. Te es imposible tener una conversación cara a cara
Cuando pasas conectado mucho tiempo al WhatsApp y eres incapaz de tener una conversación cara a cara 🗣️ con otra persona, porque solo tienes ojos para la pantalla del móvil, puede que este sea el primer indicio que defina tu adicción.
Esto es algo que ya ha parecido normal, pues comúnmente podemos conversar con personas que no te miran a los ojos, pero te hacen entender que te están escuchados, atrapados a través de la mensajería.
2. Te impacientas si no te responden
Si te molestas cuando te dejan en “azul”, o te irrita que otra persona no lea tus mensajes, o no conteste al momento, puede que sea otro indicio de lo que es un problema de adicción. Esta aplicación puede convertirse en un método de control, siendo perjudicial sobre todo en las relaciones de parejas 👩❤️👨.
Cuando una persona te escribe: “Estás en línea, por qué no respondes”, te está indicando que quiere tener un control sobre ti y debes responderle de inmediato; otra característica más de una adicción.
3. Inquietud cuando no hay notificaciones
Si eres de los que te angustia no ver notificaciones de WhatsApp y priorizas el responder mensajes 🤳 al momento, sin importar ni siquiera cuando estás en el baño; entonces puede que ya estemos hablando de una obsesión.
Hay personas que incluso pueden afectar su estado emocional, al ver que durante algunas horas no han recibido ni tan siquiera un mensaje.
4. Activo en todos los grupos de WhatsApp
Capaz de responder todos los mensajes y la obligación de leer y hasta opinar todo lo que lees por los grupos, habla de tu acción compulsiva con esta plataforma.
Terminas siendo víctima de la falsa creencia de que todo lo instantáneo, o rápido, es lo que manda. Incluso, puedes tomar decisiones sin el respectivo tiempo de reflexión.
A esto se le suma las reacciones que tiene una persona frente a todos los estados de WhatsApp que ves, siempre comentando algo, por muy tonto que parezca 🧏.
5. Discutes por el chat
Si algo nos ha llevado a una falta muy grave en este tipo de conexión es malinterpretar todo lo que nos escriben a través de la mensajería instantánea. La letra escrita, sin ningún tipo de tono, puede ser malinterpretada 🙆♀️ y causar asperezas.
Una de las formas para saber que están dentro de la línea roja de la adicción, es discutir al golpe de una tecla, y sentir la falta de autocontrol, cada vez que escribes y te irritas por algo.
6. Te llevas el móvil a la cama
Otra de las indicaciones que pueden ser síntoma de una adicción es el tiempo ⏱ que le dedicamos. Si eres de los que te llevas el teléfono 📱 a la cama, para revisar constantemente la aplicación y estar en línea con tus amigos, por el chat de WhatsApp, entonces puedes asumir que estás siendo adicto.
7. Capaz de colgar muchos estados
Además de pasar mucho tiempo conectado, puede que también los estados de WhatsApp se conviertan en algo inevitable. No solo para el que es capaz de montar cientos de estados en un día, sino también para el que los ve, haciendo que se pierda un tiempo ⏱ considerado, que puede llegar a ser productivo en otra labor.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS QUE PUEDE GENERAR ESTA ADICCIÓN?
Así como cualquier otra adicción, esta también puede generar algunos efectos negativos en nuestro comportamiento y salud mental.
Lo primero es que nos desviamos de nuestra realidad, para adentrarnos a un mundo virtual, donde las relaciones cara a cara van mermando.
Por lo general, es un trastorno que se muestra más que todo en adolescentes, quienes están dispuestos a sacrificar su conexión con la realidad, presentando conductas de aislamiento y como consecuencia, teniendo interferencia en el proceso de madurez.
Asimismo, la adicción a esta aplicación puede frenar o interferir tu capacidad productiva, pues cuando no tienes autocontrol, entonces puedes dejar a un lado las tareas importantes de tu rutina, para estar conectado por WhatsApp.
A esto le sumamos el síndrome de abstinencia, que puede afectar tu estado emocional, causando insomnio, irritabilidad, molestia 😡, soledad, ira o nerviosismo, u otras alteraciones cuando no se está conectado a la red social.
El cerebro recibe una sensación placentera, activando los niveles de dopamina, para volverte aún más adicto. Esto, sumado a la falta de autocontrol y acompañado de la intolerancia, genera una necesidad de dosis cada vez mayor.
De esta manera, puedes observar como las redes sociales, incluso el WhatsApp, puede estar afectando tu salud mental o tu forma de comportamiento.
Es importante mencionar que todo esto NO aplica para aquellos que conseguimos clientes y aumentamos ventas a través de WhatsApp.
LA VIDA ES UN RATICO, APROVECHALA